El puente Long Bien | Un verdadero ícono de Hanoi

La pesada y larga estructura de metal oxidado del puente Long Bien es una parte integral del paisaje urbano de Hanoi, la capital de Vietnam. Este encaje de acero que se extiende por el río Rojo ha sido clasificado como una reliquia histórica de Hanoi. Una obra arquitectónica frágil de primera importancia que ha atravesado la historia contemporánea de la capital. Una visita obligada durante tu estancia en Hanoi.

Historia del puente Long Bien

Símbolo colonial, el puente Long Bien, entonces bautizado puente Paul Doumer durante el período colonial en homenaje al gobernador general de Indochina que impulsó su construcción, fue construido entre 1898 y 1902 y fue inaugurado en 1903 con gran fanfarria por el futuro presidente de la república y en presencia del rey Thanh Thai. En la competencia abierta en 1897, para la construcción del puente Paul Doumer, se presentaron muchas empresas de construcción francesas.

Y a pesar de lo que escuchamos con demasiada frecuencia, no fue la compañía Eiffel la elegida, sino el proyecto de la casa Daydé y Pillé. Todavía se puede ver hoy la placa de metal con el nombre de la empresa escrito en uno de los pilares del puente. Se colocó la primera piedra y se comenzó a trabajar en la estación seca, en septiembre de 1898.

En ese momento, el puente Paul Doumer era una verdadera hazaña técnica, uno de los cuatro puentes más largos del mundo y el más llamativo del Lejano Oriente. Soportando los 1 682 m de este puente, veinte pilares de una altura de 40 m se apoyan en artesones enterrados hasta 30 m debajo del nivel del agua. El puente fue inicialmente accesible solo para bicicletas, trenes y peatones. En 1923, se le agregó una vía terrestre. El puente permitió a los residentes de Hanoi viajar al otro lado del río Rojo y, sobre todo, permitió que los trenes cruzaran el río para llegar a Haiphong, el puerto comercial más grande de Tonkin.

El tren sigue funcionando hoy, pero solo los vehículos de dos ruedas y los peatones pueden cruzar el puente. Este es un lugar popular para paseos de los hanoyenses y fotógrafos, especialmente para las fotos de bodas. La puesta de sol sobre el puente es un espectáculo fotogénico que no debes perderte durante tu estadía en Hanoi. No dudes en cruzar el puente para llegar al otro lado donde hay restaurantes frente a los puentes. Estarás entonces en primera fila para ver los viejos trenes tambaleantes, que al ruido de sus sirenas, hacen su ingreso al puente.

El dragón de acero encima del río Rojo fue bombardeado varias veces desde 1967 hasta 1972 por aviones estadounidenses durante la Guerra de Vietnam. Se convirtió en un símbolo de la resistencia del pueblo vietnamita ya que, a pesar de los daños, nunca se rompió. Hoy en día solo hay seis arcos de los diecinueve originales y solo un tercio de las piezas actuales son originales.

Mercado nocturno de Long Bien

El mercado nocturno Long Bien, ubicado debajo del puente del mismo nombre, es el mercado mayorista más grande de Hanoi. Todas las noches y hasta las primeras luces del día, un ballet incesante de camiones descarga productos de todo Vietnam, mientras que los minoristas, algunos en bicicletas, vienen a abastecerse y luego van y venden sus productos en los diferentes distritos de Hanoi. El bullicioso mercado de Long Bien vende principalmente verduras, pero también hay un sector de mercado dedicado a los mariscos de Halong y Haiphong. Es una vista realmente extraordinaria, especialmente cuando nos acercamos al Têt, el Año Nuevo vietnamita. ¡El mercado de Long Bien experimenta entonces la mayor efervescencia del año y se convierte en un verdadero hormiguero!

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Isla de plátanos en el Puente Long Bien

Debajo del puente Long Bien, hay una larga franja de tierra que la gente de Hanoi bautizó cvvomo la isla de plátanos debido a las muchas plantaciones de banano que se cultivan allí. Fruto de un largo proceso de acumulación de corrientes aluviales generadas por el río Rojo, la isla de plátanos goza de un terreno fértil que permite cultivar todo tipo de frutas, verduras pero también flores. Es un lugar encantador y campestre cuya tranquilidad contrasta con el bullicio de Hanoi. ¡Puedes descubrir este hermoso lugar rural a pie y en bicicleta para conocer a sus habitantes que se jactan de cultivar las mejores verduras de Hanoi, sin fertilizantes químicos! En la estación seca, la isla de los plátanos revela playas estacionales, una de las cuales está reservada para nudistas. Un hermoso paseo marítimo que te permitirá disfrutar de una vista única del Puente Long Bien, la dama de hierro alargada de Hanoi.

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