Los 7 platos más atípicos de la cocina laosiana
- en Dec 3, 2020       Por: Yovany
Cuando pensamos en la cocina laosiana, inevitablemente pensamos en el arroz, que aquí comemos pegajoso, algunos platos emblemáticos como el laap (carne picada o pescado) o la imprescindible ensalada de papaya verde. Salgamos de la gastronomía habitual y aventurémonos en los puestos del mercado y los restaurantes callejeros para descubrir algunos de los platos más atípicos de la cocina laosiana.
1. Piel de búfalo seca
La piel de búfalo seca o nǎng khwái hàeng es un plato muy popular entre los laosianos. En todos los mercados de Laos, se vende seca, con pelos, la piel de búfalo se puede fermentar, asar o hervir. Se recomienda tener una buena dentadura ya que este plato requiere muy buena masticación. Se consume principalmente en el campo, solo con unos vasos de alcohol de arroz o bañado en una sopa para darle sabor y masticabilidad. No estamos tan seguro de que este plato atípico de Laos te deje recuerdos duraderos, pero es uno de los elementos esenciales de la cocina atípica de Laos.
2. Sopa de hormigas blancas
El gaeng kai mot daeng, un plato inusual para los occidentales, es considerado un manjar por la población laosiana. La sopa es una mezcla de huevos de hormiga, embriones parciales de hormigas blancas y hormigas bebé para darle un toque de acidez que la hace más sabrosa. Es un manjar antiguo, popular entre las minorías étnicas que viven en áreas remotas del norte de Laos que no siempre tuvieron una dieta alta en proteínas. Para la minoría étnica Akha que vive en el extremo norte de Laos, en la provincia de Phongsaly, la sopa de hormigas blancas es un plato festivo por derecho propio.
3. Algas fritas del Mekong
Las algas fritas del Mekong, kai paen en laosiano, son una especialidad de Luang Prabang. En la estación seca, cuando el nivel del río Mekong es bajo, los habitantes recolectan algas del río que luego se enjuagan y secan al sol durante todo un día antes de rociarlas con semillas de sésamo y ser fritas en aceite hirviendo. Disfruta de algas fritas del Mekong como aperitivo sumergiéndolas en una salsa picante a base de verduras y acompañándolas con una buena cerveza fría mientras contemplas la puesta de sol sobre el mítico río asiático.
4. Patas de pollo a la parrilla
Un plato atípico que a los laosianos también les encanta como aperitivo. A la parrilla sobre un fuego de leña en una barbacoa, las patas de pollo se venden generalmente en puestos callejeros o en mercados. Bien asada, la piel puede quedar muy sabrosa y crujiente. Sin embargo, es posible que te sorprenda su aspecto gelatinoso. Como suele ser el caso en Laos, este bocadillo se sirve con una salsa picante y entre conversaciones animadas con una cerveza. En Vientiane, puedes encontrar muchos puestos a orillas del Mekong que ofrecen este pequeño capricho típicamente laosiano.
5. Ranas
Comer ranas no es un legado culinario de la presencia francesa en Laos. Es una práctica que se remonta a tiempos inmemoriales en el campo. En los mercados de Laos se puede notar que la rana ocupa un buen lugar en los puestos, a menudo junto al pescado. En el mercado, la rana se vende viva al cliente, a quien se le deja el placer de su preparación. En restaurantes y puestos callejeros, la rana se sirve con la panza rellena o simplemente asada a la parrilla en la barbacoa. Se sirve con hierbas aromáticas frescas y una salsa picante. A diferencia de Francia, donde solo se come los muslos, en Laos la rana se srive entera.
6. Orugas, larvas y gusanos salteados
Las orugas, larvas y gusanos salteados son un manjar muy popular en Laos. En Laos se comen todo tipo de gusanos, pero más particularmente gusanos mariposa, bambú, ratán o coco. Al vapor, salteados, hervidos o fritos, las orugas, las larvas y los gusanos son un placer gastronómico para los lugareños. Encontrar gusanos no es fácil ya que tienes que correr por la jungla para encontrarlos. Los conocedores aprecian su carne bastante cremosa, que para un novato en la materia puede parecer viscosa y poco sabrosa. La investigación muestra que consumir 100 gramos de orugas, larvas o gusanos podría cubrir más del cien por ciento de la cantidad diaria recomendada de minerales y vitaminas.
7. Roedores
Un proverbio popular en Laos dice "Los laosianos comen todo lo que tiene 4 patas excepto las mesas". Basta con mirar los puestos del mercado, especialmente los del campo, para darse cuenta. Hay muchos roedores que son cazados o capturados en los bosques y selvas del país. Las ardillas, los ratones de campo, los castores, los ratones, los almizcleros emocionan el paladar de los gourmets locales. La estrella de los roedores es el 'kha-nyou', un roedor con bigotes largos, patas cortas y una cola tupida que se come asado en un pincho.
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